Me encantó el modo en que se explica qué es un agente en este vídeo.
”La forma en que pensamos sobre los agentes es similar a cómo vemos los coches autónomos hoy en día, especialmente en San Francisco. Puedes imaginarte un agente de IA como un programa autónomo que, al darle una directiva de alto nivel, descubre de forma autónoma cómo llegar al objetivo por sí solo.
A veces, eso implica usar herramientas, escribir código, comunicarse con otros agentes o con humanos, y resolver el problema de manera autónoma. Tangiblemente, esto ocurre cuando combinas modelos de lenguaje grandes (LLMs) con la capacidad de utilizar herramientas. Generalmente, los LLMs solo pueden chatear y dar respuestas en texto, pero al darles la capacidad de actuar en el mundo y cambiar el estado del entorno, se vuelven dinámicos. De la misma manera que los humanos somos inteligentes porque usamos herramientas, los agentes son programas inteligentes porque también pueden usarlas.
En el mercado, los agentes se dividen en cuatro categorías:
Co-pilotos de IA: como chatear con tus datos.
Bots de atención al cliente: o chatbots que pueden gestionar conversaciones de manera autónoma.
Agente “ingenieros de software” de IA: que pueden escribir programas por sí mismos.
Agentes totalmente autónomos: son más exploratorios; se les da un objetivo de alto nivel y resuelven problemas de manera independiente, usualmente en dominios específicos.